PITAYA: REINA DE LA NOCHE
Que alegra y endulza el corazón.

Si me preguntaran cuál fruta representa mejor a México, me atrevería a decir que es la Pitaya. Primero que nada, la planta que da este fruto pertenece a la familia de las cactáceas (dentro de las que se encuentra nuestro emblemático nopal). Se consume desde épocas prehispánicas y se le conocía como “coapetilla”, que significa “serpiente gruesa”. Por todo esto, sumado a su color rosa mexicano intenso y exótico sabor, la considero como una auténtica joya mexicana.
Se produce en la época calurosa del año (15 de abril al 15 de julio) y se dice que el 81% de las especies son endémicas, sus poblaciones silvestres pueden encontrarse de Sonora a Oaxaca o desde Tamaulipas a Veracruz. Los colores vibrantes, las espinas que le cubren pero sobre todo su sabor, la introducen en la lista de los diez frutos más exóticos del mundo. Originalmente su color es de un rojo intenso pero gracias a la labor de los insectos, aves y mamíferos polinizadores se han reproducido frutos de color amarillo-naranja, blanco y rosa. Como dato curioso: si se siembra la semilla del fruto amarillo el brote será del color rojo original, en cambio si se transplanta un brazo esqueje de fruto amarillo reproducirá siempre este color.
Es común que se suela confundir Pitaya con Pitahaya, aunque pertenecen a la misma familia de plantas cactáceas la Pitaya proviene de la especie (Stenocereus) un cactus nativo de México de tallos altos, rectos y acanalados.
La Pitaya es una fruta muy aromática y con un sabor exquisito, no por nada le llamaban “El alimiento o fruto de los Dioses". Los aztecas fabricaban vino con su abundante jugo que lo llamaban "Colonche" al combinar su pulpa con la tuna, lo fermentaban puesto al sol en los meses de agosto y septiembre en medio de festividades y danzas. También era utilizado para prevenir la deshidratación, pero además aprovechaban sus propiedades curativas. Los Seris de Sinaloa la única etnia en México que dedica un ritual en el mes de junio, celebran su llegada de la Pitaya con una bebida fermentada.
Por su singular aspecto y sabor se le ha dado uso culinario. Se utiliza para obtener diversos alimentos, entre los que sobresalen mermeladas, bebidas refrescantes, nieve, entre otros. Marcas como Casa de Flores producen una deliciosa gama de productos.
Existen varios festivales de la Pitaya por todo el país, entre ellos destacamos los siguientes:
Plazoleta de Las Nueve Esquinas
Colón y Galeana, Centro Histórico de Guadalajara.
Todo el mes de junio
Santo Domingo Tianguistengo
Feria celebrada en Chazumba Oaxaca
17 y 18 de Mayo
Festival Anual de La Pitaya
Amacueca, Jalisco
14 y 15 de Mayo
La Pitaya es tan emblemática en nuestro país que la heráldica de Sinaloa y Amemecua la presentan con orgullo. Baja California Sur por su parte, cuenta con un hermoso traje típico llamado "Flor de Pitaya". También existe una obra que reune a diversos artistas que rinden homenaje a esta fruta "Pitayas en las artes plásticas, la historia y la literatura" grandes artistas consagrados como Frida Kalho, José María Velasco, José Chávez Morado, Raúl Anguiano, Manuel Álvarez Bravo, entre otros plasmaron la escencia de este fruto.
De ahí un bello poema escrito por Clemente López Trujillo
Tropicalmente mía...
Oh tu color, oh tus matices varios.
Tus veinte mil retinas
-vértices de tus ojos apagados-
en tu carne hormiguean
como relámpagos
Flor y fruto
Alegría rumorosa
pudo haber sido
en los ojos de Góngora
Blanca
Roja
Se rompe en las manos,
hacia el camino de la boca,
como puntas de lengua
la multiplicación de tus facetas.
Pitaya
tropicalmente mía
Relámpago Bicolor